El título del artículo es bastante claro, quiero mostraros varios motivos de peso por los que escribir bajo los efectos del alcohol (sin pasarse) puede ser beneficioso para conseguir vuestros objetivos.
Antes que nada, creo que es necesario aclarar que NO he bebido nada antes de escribir éste artículo. Tampoco es una incitación para que aprovecheis ahora para emborracharos cada vez que tengais que publicar algo nuevo con la escusa de que sólo lo haceis por el bien de vuestro blog. Únicamente se trata de un experimento que os puede dar resultados muy satisfactorios si lo utilizais para uno de vuestros posts, repito, UNO de vuestros posts 😉 . Ya de paso aviso que, aunque he hablado en masculino durante todo el artículo, ha sido por comodidad, y que también va dirigido a toda bloguera borrachina que se precie. Es importante que antes de empezar el experimento en cuestión, ni siquiera hayas decidido sobre qué vas a escribir (evitando todo tipo de alusiones a tu ex..).
Dicho esto, aquí van varios motivos por los que tomarte alguna copichuela puede ayudarte a hacer una publicación de calidad:
- Ganarás creatividad: posiblemente, te de por probar alguna cosa nueva en el blog. Tal vez un cambio en la tipografía, algún color, lo que sea.O tal vez simplemente una temática que en cualquier otro momento te habría dado miedo a tratar, bien por tu desconocimiento, bien por la poca relación con tus demás publicaciones. Puede que te de por crear un tipo de contenido diferente al habitual, un vídeo, por ejemplo.
- Atrevimiento alcohólico: No tienes miedo a nada. Con un poco de suerte, decidirás probar alguna red social nueva, o bien invitar a tus amigos de Facebook para que de una vez por todas conozcan tu alter-ego.
- Serás más crítico: puede que este sea el mejor momento para hacer un review sobre algún producto o servicio que NO te haya gustado. Perderás el miedo a posicionarte y a ser suficientemente radical como para llamar la atención del lector. Cuando buscamos una opinión sobre un tema en internet, no esperamos que todo sean comentarios positivos; queremos saber lo bueno y lo malo que tiene antes de decidirnos a pagar por él.
- Te creerás gurú por un día: y es que… a quién no se le han subido los humos durante el puntillo.. Te creeras mejor escritor, y un experto en la materia que trates en tu bitácora. Ese punto pedante que tanto suele convencer a los lectores será tuyo por unas horas, no lo desperdicies!
- Te convertirás en una enciclopedia con patas: lo sabrás todo sobre todo. ¿O alguna vez un borracho ha admitido no saber algo? Por complicado que parezca un tema, seguro que de golpe aparece como por arte de magia un sinfín de conocimiento en tu cabeza que hasta el momento no sabías que tenías. Otro tema será ver si es cierto o no… 😛
- Facilidad para sacar lo que tienes dentro: con esto me refiero a tu corazoncito, y no a dañar el teclado por un exceso de bebercio… 😉 Te abrirás más a tus lectores, dejarás que te conozcan más.
- Perderás la vergüenza: siempre es bueno poseer ese punto de insolencia que mantiene al visitante pegado a la pantalla para saber con qué te atrevirás ahora. Dejarás la vergüenza en casa por un día y con ella el miedo a hacer el ridículo, por ejemplo, en el vídeo del que hablábamos en el primer punto.
- Serás más sincero: tendrás una suma facilidad para explicar cuales son tus objetivos, tus beneficios al trabajar con referidos, etc. Un punto muy humano que seguro que te agradecerán.
- Confianza máxima: cuanto mayor es la cantidad de alcohol ingerida, más atrativo se cree uno. Lo mismo pasa con un blog (aunque yo no me pasaría con la cantidad..). Creeras ser el centro de atención, que tu blog es el más perfecto de toda la blogosfera y que hay millones de personas deseando ver la genialidad de tu próxima publicación. Aprovecha la confianza ganada para transmitirla a quien te lea.
Posiblemente por la falta de alcohol en mis venas, mi imaginación ha dejado de dar de si y no se me ocurren más motivos para convercerte. Si quieres ayudarme a completar la lista, deja un comentario!
Como último recordatorio, quiero repetir una vez más que no se trata de tener una resaca impresionante la mañana siguiente a la escritura, sólo de probar a achisparse un poquito antes de tu próxima publicación ;).
Para ayudar a difundir el alcoholismo bloguero, únicamente te pediré que, si te ha gustado el artículo, lo compartas con tus contactos. Salud!